Bill Lazor por “Soy un coordinador ofensivo tan molón y original que voy a hacer lo que nadie se espera, aunque sea lo peor para el equipo”.

Una cosa es ser mejor que Zampese, que no es difícil, pero otra muy distinta es ser un coordinador ofensivo tan limitado, predecible y simplón, que sea incapaz de dar al equipo la fluidez ofensiva que necesita. Ni siquiera, sacar de la manga una jugada imaginativa, inesperada, que sea capaz de romper una dinámica tan soporífera.

Driskel no es Dalton. De hecho, no es ni McCarron. Es un QB con unas características que difieren de las de los anteriores como de la noche al día. No es preciso, ni buen lector de jugadas. En cambio, es más fuerte y ágil. ¿Por qué se empecina en hacerle jugar justo al contrario de cómo más le conviene? Me parece increíble que sólo corriese en dos ocasiones, o que no pruebe más el lanzamiento profundo. Es buena idea reducirle el número de pases, pero como OC, es su obligación diseñar jugadas en las que pueda sacar mayor partido a su movilidad.

1ª y goal desde la 3. Ahí hay que ir a romper a saco, con jugadas de potencia (con un RB que no se llame Bernard). El playcall fue lamentable. En la 2ª parte se repitió la circunstancia, y menos mal que los árbitros señalaron holding contra Chargers porque el resultado había sido el mismo. Y en las conversiones de 2, nos jugamos sendos pases, cuando lo único que nos estaba funcionando era la carrera. Dio la impresión de no haber preparado estas jugadas.

Sin embargo, la palma se la lleva el 4ª y 1 jugado en nuestra propia yarda 35 con un pase atrasado para la carrera infructuosa de Mixon. Demencial. De despido inmediato. Dicho turnover on downs nos costó 3 puntos, y ya sabemos por cuánto perdimos. Aplaudo la idea de ser agresivos, pero con cabeza; y las jugadas elegidas en estas situaciones fueron las peores posibles.