Una situación rara, pero no por ello menos satisfactoria, es encarar el 2º partido de la temporada con una victoria ya en la saca. Sin embargo, como dice Burrow, “vamos 1-0, pero esta semana también queremos ir 1-0”. Una manera un tanto extraña de explicar que la mentalidad del equipo es ir “partido a partido” (¡con lo fácil que se entiende así!). Así que toca preparar el partido en el Soldier Field de Chicago del próximo domingo a las 7 de la tarde en España, 2 de la tarde en Argentina y 12 del mediodía en México. En una tarde que se prevé soleada en la tradicionalmente fría capital del estado Illinois, bajo una temperatura que rondará los 28ªC, con una brisa de apenas 12 Km/h en la llamada “ciudad del viento” y una humedad relativa del 64%.
Obviamente, el foco de atención se lo lleva Dalton. Tanto por su pasado bengalí como por lo discutido de su titularidad en el equipo de los osos. Ya es casualidad que nos lo encontremos enfrente cada año. Recordemos que el pasado nos dio un buen repaso en el Paul Brown Stadium al frente de los Cowboys. Aparte de él, pocas conexiones más hay entre ambas franquicias. Quizá señalar que su coordinador ofensivo es Bill Lazor, despedido de aquí, con buenas razones, al acabar la temporada 2018.
Tampoco son frecuentes los enfrentamientos entre ambos equipos. Tan solo 11 veces en toda nuestra larga historia, con ligera ventaja para nosotros 6-5, pero recordando que las dos últimas veces que nos vimos ganaron ellos. Todavía es pronto para sacar conclusiones, pero sin duda, uno de los alicientes del partido será ver frente a frente a los dos líderes en yardas terrestres de la NFL: Mixon y Montgomery. El uniforme que vestiremos llevará la combinación de camiseta blanca con pantalón negro, que personalmente, nunca me ha convencido demasiado.
Dirigirá el encuentro el director de construcciones del ayuntamiento de Alburquerque Land Clark. En solo su 2º año como árbitro principal, ya nos ha pitado en dos ocasiones, ambas saldadas con derrota, contra Colts y Ravens. A ver si a la tercera va la vencida, porque como juez de línea, también perdimos (hace 3 años contra Pittsburgh).
En ataque
Si bien los primeros partidos de temporada suelen ser más una toma de contacto que una visión real de las propuestas ofensivas, sí que nos dejó algunas claves que sin duda se repetirán el próximo domingo. La primera de ellas es que Burrow no está al 100% en el apartado físico. Por lo tanto, parece razonable pensar que, salvo que nos encontremos desde muy pronto con el marcador en contra, de nuevo veremos más carrera que pase, y que estos serán mayoritariamente rápidos y a zonas de seguridad.
La línea ofensiva ofreció muy buena cara frente a Minnesota, pero en Chicago volverá a encarar rushers tan peligrosos como Khalil Mack o Akiem Hicks. Por eso mismo, que Burrow se desprenda pronto del oval parece una excelente idea. Recordemos que la protección al QB no es sólo responsabilidad de ellos, sino que TEs (Sample) y RBs (Perine) también deben contribuir en esta misión de manera más eficaz que la pasada jornada. Igualmente, esperamos que con algo más de rodaje, Hopkins vaya recuperando su mejor forma.
Mixon debe volver a ser nuestro principal caballo de batalla, pero la secundaria Bear es vulnerable. No debería ser difícil encontrar emparejamientos favorables para Higgins, Chase o Boyd. Incluso aunque el pase sea corto, deberían tener buenas opciones de sumar yardas tras la recepción. En el pase largo también sufren, pero esta opción sólo deberíamos utilizarla en momentos puntuales, siendo preferible reducir riesgos de turnover. También me gustaría ver a Tate como WR4 por delante de Thomas.
En defensa
Contra Vikings recuperamos la presión y éste debe ser el camino a seguir contra Bears. Su línea ofensiva, que no era de las mejores de la competición, puede encontrarse sin LT de garantías tras las lesiones de Peters y Borom. Por ahí habría que atacar sin cuartel, porque ya conocemos la capacidad para cohibirse de Dalton cuando se siente muy presionado.
Sin embargo, también conocemos la habilidad del pelirrojo para conectar pases con precisión a la zona intermedia. Mucho cuidado por aquí. Hilton debe estar muy pendiente de Goodwin, su WR-slot para evitar que avancen con continuidad. También Awuzie y quien quiera que sea nuestro CB2 (¿Phillips tal vez, viendo la inutilidad de Apple?) con las rutas cruzadas de Mooney y Robinson.
Dado que su táctica será avanzar mediante yardas después de la recepción, de nuevo cobra gran protagonismo la rapidez de Bates para hacer de apagafuegos. Le va a tocar cubrir una gran extensión del campo, y no sé si Bell, más capacitado para frenar la carrera, vaya a ser de gran ayuda en este cometido. La lesión de Ricardo Allen ha llegado en un momento muy inoportuno (como todas), pero me sorprende que no hayan subido desde el Practice Squad a Henderson, o al recién fichado Sean Davis (otro exSteeler). Quizá Brandon Wilson deba hacer algo más que limitarse a los retornos.
No obstante, donde debemos hacernos firmes es en la defensa de la carrera, para hacer que el partido deba depender de las manos de Dalton. El otro día nos dejó un poco fríos la pareja Wilson-Pratt, y este domingo debe resarcirse. Contra Montgomery debemos estar rápidos y contundentes. No es tan peligroso recibiendo (para eso tienen a Williams), pero es muy explosivo, y con gran capacidad par romper placajes. Aquí sí será valioso el auxilio de Bell.
Esto sería lo normal, pero en ocasiones, Nagy alinea a Fields como QB, lo que cambia todo lo anterior. Es muy peligroso corriendo, y esto nos suele descolocar. Quizá ahí pueda tener su papel Davis-Gaither como “espía” para seguirle en sus movimientos. Otros que nos pueden hacer daño son sus TE: Kmet y Graham. La semana pasada recibieron 9 lanzamientos para avanzar 53 yardas. Su corpulencia puede poner en apuros a Bates, así que de vigilarles debería encargarse alguien más potente.
El rival
La mayor controversia en las filas osunas se enfoca a la posición de QB. Todos saben que tarde o temprano, Fields será el titular a tiempo completo. La duda es cuánto de tarde será ese temprano. Dalton ya recibió pitos en casa durante la pretemporada, por lo que un arranque irregular del pelirrojo derivará en una situación insostenible. Y a nosotros no se nos suelen dar bien los QB rookies.
Si bien nuestros mayores problemas de lesión están en secundaria, en su caso es en las trincheras. Peters, con molestias, tendrá que forzar en el LT porque su suplente Borom está prácticamente descartado. El DT Goldman también llegará muy justo. Por lo demás, el equipo está sano en el resto de líneas, y su moral no se ha visto en exceso afectada. La derrota contra los Rams entraba en lo previsible, y las derrotas de todos los componentes de su división deja las cosas tal como estaban al comienzo de la liga.
Donde han saltado las alarmas ha sido en su pobre rendimiento defensivo. Chicago es de esos equipos que hacen de la defensa su bandera, y el repaso sufrido en Los Angeles ha escocido bastante. Debemos esperar por tanto que salgan con el cuchillo entre los dientes delante de su afición. Sin embargo, tampoco han reforzado su secundaria, por lo que de nuevo lo fiarán todo a su potente pass-rush.
Como nosotros, es un equipo con poco que perder, así que Nagy no va a dudar en jugarse 4ºs downs. Esto va a suponer un esfuerzo extra para nuestra defensa, que debe mantener la concentración incluso más allá del tercer down. Cuidado también con sus retornos. No debemos permitirles que tengan buenas posiciones de campo para comenzar sus drives.
La clave
Como dije para el partido anterior, en estos primeros partidos de la temporada es fundamental no cometer errores. Vikings pagó caro el único turnover del partido, y a nosotros nos puede pasar lo mismo si no cuidamos la posesión. Pero la posesión también debe protegerse desde el banquillo, sin más decisiones absurdas de Taylor.
Otro factor determinante puede ser el tiempo de posesión. El domingo pasado quedamos prácticamente igualados con Minnesota, lo que se tradujo en mucho sufrimiento cuando no éramos nosotros quienes llevábamos el oval. Hay que cansar a su defensa, y para esto tenemos que encadenar drives que consuman mucho reloj. Nuestro ataque es explosivo, pero no nos van a dar más puntos por irnos a una alta anotación si a cambio también encajamos bastantes. Por otro lado, tampoco debemos perder de vista el objetivo principal de este año, que es el de progresar, y no podremos hacerlo exponiendo a Burrow a excesivo riesgo. Todavía no.
Puestos a pedir, creo que nos vendría muy bien ponernos pronto por delante en el marcador y hacer que les surjan dudas y su público se impaciente. Si ocurriese al contrario, lo que no podemos hacer es volvernos locos y salirnos del plan de juego. Creo que el partido se va a decidir por pocos puntos de diferencia, y seguro que al final tendríamos nuestras opciones.
Los Bears son favoritos por 2,5 puntos. Sin embargo, yo lo veo al revés. Chicago y Cincinnati me parecen franquicias muy parejas. Cada una con sus particulares virtudes y carencias, creo que los Bears son un equipo, como se suele decir, “de nuestra liga”. Apuesto por una victoria 17-20 para ponernos por delante en solitario en la AFC Norte.
Redactor en Bengals.es
Redactor en Spanish Bowl
Ex-Redactor de la AFC Norte de la NFL en el Diario AS
Colaborador de «La Perrera Brown».
Integrante del foro de los Cincinnati Bengals en NFLHispano.com