Vuelta al tajo tras varios días de recuperación física y recapacitar sobre lo hecho. De lo primero, parece que hemos aprovechado poco. Atkins y Daniels siguen con sus molestias y son sería duda para el domingo. Al menos, parece que recuperamos a Shawn Williams y no hay nuevos lesionados tras la confirmación de la baja definitiva de Uzomah. De lo segundo, no tengo claro si los técnicos habrán tomado nota. Parece que Johnson se confirma en la titularidad en el RG (la vuelta de Redmond no ha supuesto ninguna variación), y Anarumo sigue convencido de que la formación nickle es idónea para parar el juego de carrera…
La próxima jornada recuperamos nuestro horario más habitual: 7 de la tarde en España, 12 del mediodía en México. La temperatura se prevé agradable: unos 24ºC, pero con una alta humedad (80%). Cielos nublados que podrían descargar algo de lluvia hacia el final del encuentro. Un poco de viento (no tanto como el pasado domingo), que no debería ser impedimento para el lucimiento de los pateadores.
Unos kickers que tienen en común haber vestido el uniforme atigrado, ya que todos recordamos tanto que Elliott fue escogido por nosotros en 5ª ronda, como el cabreo que nos supuso que le dejásemos marchar por, ejem, Randy “pantorrillas” Bullock. No será la única cara conocida entre los blanquiverdes porque tienen como entrenador de QBs a un tal Press Taylor. Sí, lo habéis adivinado, el hermano pequeño de nuestro head-coach. Franks, uno de los TEs que cortamos, está en su Practice Squad. Nuestro entrenador de TEs y el asistente de equipos especiales jugaron en Eagles. Su entrenador de línea defensiva, Burke, también entrenó la nuestra en 2014 y 2015, mientras que nuestro entrenador de WRs, Bicknell, estuvo en su staff entre 2013 y 2015.
Ambos equipos llegamos con la urgencia de alcanzar la primera victoria. Ellos van 0-2 como nosotros, pero mostrando una mucha peor cara. Además, contaban como candidatos a playoffs, por lo que la exigente afición de la ciudad del amor fraterno les crucificará como no ganen. El histórico no les favorece. Nosotros hemos ganado 9 de los 14 enfrentamientos anteriores, con un empate, recordado porque McNabb no sabía que se podía acabar así un partido. Hemos ganado 3 de los últimos 4 encuentros, y no perdemos con ellos en lo que va de siglo. Vestiremos de camiseta blanca y pantalón negro, una combinación que creo es la que menos nos gusta a los aficionados.
Dirigirá el encuentro el equipo arbitral comandado por Adrian Hill, otro colegiado poco experimentado en la NFL (solo es árbitro principal desde 2019), pero “de altura”, ya que es ingeniero de software en el Johns Hopkins Applied Physics Laboratory Space de Maryland, donde trabaja en programas relacionados con la NASA y la exploración espacial. Ya en la Tierra, nos pitó dos partidos el año pasado, ambos en casa: la derrota contra Pittsburgh y la victoria contra Cleveland. Vive con su esposa en la ciudad de Bowie, que se llama como el cantante favorito de mi mujer, y como nuestra gata (datos que no aportan nada, pero rellenan artículo).
En ataque
Los 37 pases completos de Burrow contra Browns fueron record para un rookie. A todos nos entusiasmó, pero por favor, rebajemos la cantidad de lanzamientos. No solamente incrementamos la posibilidad de que sea interceptado, sino que le exponemos excesivamente a recibir golpes, dada la mediocridad de nuestra OL. Necesitamos que nuestra ofensiva sea más balanceada, y reservar la magia de nuestro chico maravilla para los instantes finales cuando, probablemente, más la necesitemos.
La línea ofensiva no tiene remedio. Esperemos que Johnson vaya adquiriendo experiencia y que Adeniji doblegue la curva (un término por desgracia demasiado frecuente) de su aprendizaje. Pero mientras, toca seguir sufriendo. Lo que no podemos, ni debemos conformarnos, es a renunciar al juego de carrera. Mixon ya ha hecho grandes cosas con esta patética OL, y necesitamos que vuelva a hacerlas. Igual debe buscar más las “outside” que las “inside” en las carreras zonales. Igual hay que abrirle más el campo para que tenga espacio. Igual hay que buscarle como receptor abierto. En todo caso, es un jugador demasiado talentoso como para que su aportación se quede en unas 150 yardas combinadas en 2 partidos.
Y la razón de convertir a Mixon en pieza fundamental del ataque se refuerza viendo el estado de forma de Green. Ha perdido velocidad, ha perdido capacidad de separación, le falta esa chispa que le hacía atrapar lo inatrapable… Necesita muchas más repeticiones con Burrow para que ambos estén compenetrados… o habrá que buscar otro receptor más efectivo. Boyd, por ejemplo, lo está haciendo mejor; pero hay otros receptores que quizá necesitarían más atención, como Ross o Tate, y que no se le está dando.
Pero al receptor que más se había ganado la confianza de Burrow ya no volveremos a verle. Ya destacó nuestro compañero Xevi en el podcast que el mayor número de entrenos con Uzomah (recordemos las ausencias de Ross, Green y Higgins en el training–camp por diferentes motivos) le había destacado como su más fiable válvula de seguridad. E incluso como objetivo de su primer touchdown (que por confusión yo consideré fruto de un pase más corto en el podcast, mis disculpas por el error, fue un gran pase de 23 yardas como decía Sergi). Su baja será difícil de cubrir. Sample lo hizo bien, pero no es ésta su misión. Una pena porque Higbee, el TE de Rams, les endosó 3 TDs el pasado domingo, así que Eagles tiene una clara debilidad ahí.
Al igual que comentaba para los WRs, también entre los RBs debemos optimizar nuestro plantel. Bernard se quedó en 1 carrera en Cleveland. Aparte de quedarse en protección de pase en 3ºs downs (algo que sabe ya hasta mi gata), deberíamos involucrarle más como corredor, que también sabe moverse entre el tráfico y siempre ha dado el 100% de esfuerzo. Lo mismo puedo decir de Perine, fichado como RB de potencia, pero de momento inédito aunque se nos hayan presentado ya varias oportunidades donde sus características hubiesen resultado muy útiles.
En defensa
En el entrenamiento del miércoles, el club dio descanso a Dunlap. Alguien apuntó, no sin acierto, si no había descansado ya suficiente en el partido de Cleveland. El pass-rush aportado por nuestra línea defensiva está rozando el patetismo. Esto puede aceptarse ante QB móviles, como Taylor y, en menos medida, Mayfield, pero no puede continuar contra Wentz. Si no conseguimos agobiarle (y las bajas en su línea ofensiva son propicias para ello), vamos a sufrir mucho, porque el pelirrojo (esta vez el QB pelirrojo es el suyo) es un pasador muy preciso.
Además, nuestra secundaria no atraviesa su mejor momento. Esta vez no nos vamos a enfrentar a WRs de la categoría de OBJ o Landry, pero la velocidad de Jackson o Ward nos pueden poner en aprietos. Necesitamos que Wentz no se encuentre cómodo para ayudar a nuestros CBs (especialmente a Phillips) en sus marcas. Pero el principal peligro de las águilas viene por sus tight-ends. Ertz y Goedert son sus objetivos favoritos, y los únicos jugadores con TD de recepción. Si cubriendo WRs somos deficientes, con los TEs ya es ridículo. Aquí sí debemos emplearnos a fondo. Buen momento para que el LB novato Wilson demuestre su valía, o que algún safety asuma esta responsabilidad.
Otro problema con que nos vamos a encontrar es la debilidad en el centro de nuestra línea defensiva. Sin Atkins no hay pass-rush interior. Sin Daniels estamos sufriendo contra la carrera (y cuando mejor jugó Philly contra Rams fue cuando comenzaron a correr). No tienen RBs muy pesados, pero sí muy veloces. En este sentido, debemos recuperar la eficacia mostrada contra Chargers y estar muy atentos a las evoluciones de Sanders, así como a las de Scott cuando salga a recibir. Pratt y Bynes deben hacernos recuperar la confianza que se dejaron en Cleveland.
Por otra parte, tampoco nos vendría nada mal algún big-play desde la defensa. Intentar ser “agresivos” para provocar algún turnover (ya que raro será que nuestro ataque no cometa alguno). La ratio de pérdidas de posesión de Filadelfia es de -5, así que alguna oportunidad se nos va a presentar.
El rival
Las aspiraciones de playoffs al principio de temporada se les fueron diluyendo a medida que caían lesionados en su línea ofensiva durante el training-camp. El inicio liguero ha confirmado la tendencia. No pudieron contra un equipo en construcción como el de Washington, y apenas pusieron oposición a Rams. Su defensa ha encajado una media de 32 puntos, mientras que en ataque aún no han superado la veintena. Si buscábamos un equipo vulnerable contra el que conseguir nuestra primera victoria, la visita a Philadelphia no puede venir en mejor momento.
Obviamente, gran parte de culpa la tienen sus numerosas lesiones. A las bajas de Brooks (OG) y Dillard (OT) en pretemporada, se les ha unido la de Seumalo (OG). Tuvieron que recurrir en agencia libre al veteranísimo OT Peters (38 años). Johnson, el otro OT, también está con molestias en el tobillo. Una ocasión propicia para que Dunlap, Hubbard y Lawson se hagan notar por primera vez este año.
Pero las lesiones no sólo les afectan en la OL. Su cuerpo de receptores está bajo mínimos. A la baja de larga duración de Jeffery se les ha unido la de Reagor. Si no aparece J.J. Arcega el domingo, realmente no sé cuándo lo hará. Otra ventaja que no debemos desaprovechar, aunque como decía antes, el peligro viene por sus Tight-ends, o por sus RBs alineados propiamente como receptores (el gameplay de Peterson es mucho más imaginativo que el nuestro). Cuidado con las posibles jugadas de engaño a cargo del QB/RB/WR Jalen Hurts.
En defensa, nuevamente nos volvemos a enfrentar a una DL poderosa, aunque de nuevo, las lesiones salen en nuestra ayuda, ya que Cox, uno de los mejores DTs de la competición, es duda para el encuentro. No obstante, el veterano DE Graham (32 años) o nuestro conocido ex–Steeler Hargrave son también muy peligrosos.
Su línea de LBs carece de nombres populares, pero como la nuestra, son jóvenes en crecimiento. En secundaria destaca el CB Slay, quien probablemente se convierta en la sombra de Green. A su kicker Elliott, ya lo conocemos. Es muy bueno, tiene una considerable potencia, pero tampoco es infalible (aunque es probable que esté muy motivado contra nosotros).
La clave
Insisto en lo dicho para el partido pasado: nuestra defensa debe dar un paso al frente. El ataque, con sus problemas, ya hemos visto que es capaz de anotar. Lo que hay que evitar es que nos anoten ellos. Y una muy buena manera de ayudar a la defensa es que el ataque controle el tiempo de juego. Propiciar drives largos para que nuestros defensores puedan estar mucho más descansados y activos. Resumiendo:
- En defensa: presionar a su QB.
- En ataque: hacer que funcione el juego de carrera.
Si conseguimos que estos factores caigan de nuestro lado, tendremos muy buenas opciones de llevarnos el partido. Puedo imaginar un partido algo más entretenido que los anteriores, con marcadores generosos, pero también igualado hacia el final. Es importante que sean ellos quienes se salgan de su plan de juego, y no nosotros tener que ir a la desesperada. En este tipo de encuentros, cualquier detalle es fundamental, y uno nada despreciable es el hecho de que Brandon Wilson, nuestro retornador de kickoffs, lidera de largo las estadísticas de la NFL con 43,7 yardas por retorno (el segundo se queda en 34).
Mi pronóstico es de victoria 30-27. A ver si los dioses Cartagineses y Romanos, que este año se han quedado sin Fiestas en Cartagena, nos ayudan a que se cumpla.
Redactor en Bengals.es
Redactor en Spanish Bowl
Ex-Redactor de la AFC Norte de la NFL en el Diario AS
Colaborador de «La Perrera Brown».
Integrante del foro de los Cincinnati Bengals en NFLHispano.com