Bengals 2020Previas

Previa Steelers – Bengals

Es Steelers Week. La primera de las dos semanas del año donde preparamos el enfrentamiento contra nuestro máximo rival. ¿Qué os voy a contar a vosotros, sufridos seguidores bengalíes, que no sepáis, o sintáis, sobre el conjunto acerero? Es el día en que vuelven a nuestra memoria los fantasmas de Von Oelhoffen cayendo sobre la rodilla de Palmer, de Jeremy Hill arruinando el wildcard con su fumble y de todo lo que vino después, de las mandíbulas rotas de Rivers o Huber, y en fin, de tantas y tantas humillaciones sufridas contra el conjunto de Pittsburgh.

Cuando digo que son nuestro máximo rival me avalan los números. Es el equipo contra el que más veces nos hemos enfrentado: 101 partidos, de los que sólo hemos ganado 35. Pero lo que más nos duele es que no les ganamos desde el 1 de Noviembre de 2015. Ya van 10 derrotas consecutivas. En algún momento se debe cortar la racha, esperemos que sea el próximo domingo, recordemos que en el segundo turno, es decir, las 22:25 en España (otra vez toca acostarse muy tarde), 15:25 en México y 17:25 en Argentina.

En nuestras filas, hay varios jugadores que han vestido la elástica amarilla y negra. Bullock estuvo allí en 2016 (se podría haber quedado), Fred Johnson fue originalmente firmado por ellos como undrafted en 2019. El último fichaje para nuestro Practice Squad, el CB Allen fue 5ª ronda suya en 2017 (y por cierto, está en la lista de excluidos por covi-19), y la flamante adquisición conseguida a cambio de Dunlap, el OG Finney, fue adquirido por Pittsburgh como undrafted en 2015 y estuvo allí hasta 2019. A nivel de entrenadores, Eason, nuestro coach de DL fue jugador steeler de 2007 a 2010 (esto explica muchas cosas), y ellos tienen como asistente defensivo a Austin, que estuvo dirigiendo (muy mal por cierto) a nuestra defensa en 2018.

Para el partido se espera lluvia (probabilidad de precipitaciones del 90%). No nevará, porque las temperaturas se esperan del orden de los 10ºC, pero también hará un viento bastante incómodo (ojo a los field-goals, que si siempre son complicados ahí, el domingo lo serán más). Vestiremos con camiseta blanca y pantalón negro, la combinación más habitual cuando vamos de visitantes, cuyo porcentaje de victorias es de apenas el 40,7%.

Dirigirá el encuentro el colegiado Adrian Hill. Diréis, “¡este tipo me suena!”, y tendréis razón, Fue quien dirigió el partido que acabó en empate en Philadelphia. Quizá los más desmemoriados no recordaréis el nombre, pero si os digo que cuando no arbitra trabaja para una empresa de la NASA, entonces quizá ya os acordéis mejor. Como buen ingeniero, en ecuánime en sus actuaciones, y de los 3 partidos que nos ha pitado como árbitro principal (sólo lo es desde 2019) contamos con una victoria, una derrota y un empate. Otra curiosidad es que fue precisamente quien dirigió el último partido que nos enfrentó a Steelers, en la derrota 10-16 en el Paul Brown Stadium del 24 de Noviembre de 2019. En la última vez que viajamos al estado de Pennsilvania, el empate contra Eagles, aunque tuvieron decisiones discutibles (en especial en la prórroga) no creo que al final fuese un factor desequilibrante.

Un Heinz-Field sin la presión de las «terrible towels» será menos temible (foto de Scolin sports)

 

En ataque

Nuevamente, la composición de la línea ofensiva supone el mayor quebradero de cabeza en la ofensiva. Lo único claro es que vuelve Hopkins, pero con el fichaje de Spain, la llegada de Finney y la activación de Su’a-Filo, tenemos más competencia para los puestos de OG, ya que Jordan también está recuperado. Además, yo no sacaría tan pronto de la ecuación a Redmond, ya que los nuevos aún deben adaptarse al sistema.

El principal problema lo tenemos en los puestos de OT. Hart no termina de sanar de su problema en el pie, y Johnson está con el Covid-19. En el lado izquierdo, Williams está entrenando, pero no al 100%, así que sólo nos queda Adeniji. Suponiendo que estos dos sean de la partida, se repartirán Williams el LT y Adeniji el RT, pero si no, habrá que dejar a Adeniji en el LT e improvisar en el RT (¿Hopkins ahí y Price en el C?). Todo esto el día, que nos enfrentamos a un impresionante front-seven. ¡Genial!

Tampoco está clara la presencia de Mixon. Una ligera molestia en el pie que ya le va a tener apartado del juego un mes. Un nuevo éxito de nuestro equipo médico. Pero aquí me preocupa menos, ya que Bernard siempre da garantía de rendimiento. Otra cosa es que rinda el juego de carrera, puesto que no sólo depende de él. Si la línea no abre huecos, da igual uno que otro. En todo caso, me parecía buena idea proseguir con la rotación de RBs con Perine.

Quien debe ser el motor de la ofensiva es el juego de pase. La secundaria acerera puede ser su parte más débil, pero con cuidado. La presión de su frente defensivo es tal que fuerza malos pases, que saben aprovechar muy bien en forma de intercepciones. La idea sería abrir mucho el campo con varios receptores, obligándoles a reducir los LBs para alinear más DBs. Tenemos cierta ventaja aquí, ya que nuestro fondo de armario es mejor. Quizá no sea el mejor día para Green, pero si repartimos el trabajo, podemos tener una opción por esta vía.

En cualquier caso, Burrow deberá protegerse mucho más que contra cualquier otro rival. Estos nos tienen ganas, y no van a dudar en crujirle. Mucho shot-gun y pocas aventuras en solitario. Es un día para aprender, no para arriesgar. Tomlin va a proponer defensas cambiantes, y tendrá que estar muy atento para no confundirse. Por ejemplo, cuando sus OLB bajen en cobertura, es el momento de atacarles, porque aquí es donde más sufren.

Tyler Boyd volverá a enfrentarse al equipo del que era seguidor desde niño… y al que ya le ha anotado en más de una ocasión (foto de Frank Victores/AP Images)

 

En defensa

La estrategia cambia mucho si está Roethlisberger o no. De momento, sigue en cuarentena por el protocolo de Covid-19, y si da negativo podrá jugar. La lesión que sufrió contra Cowboys no sería impedimento, otra cosa es que prefieran reservarlo para no agravarla, una vez que ya parece prácticamente segura su presencia en playoffs.

Al #7 de los acereros le conocemos sobradamente. Si le entras en blitz no forma de tumbarle y te completa el pase. Si hacemos contain y le damos tiempo, lo completa igual. Si presionas por el medio, sale en scramble. Si por los extremos, corre por el centro. Yo creo que lo mejor sería defender fuerte a sus receptores, pero nuestra secundaria no está bien, sobre todo si se confirma la baja de Phillips.

Habrá que tener mucha precaución en la zona media. No tanto por los tight-ends (que también) sino por lo escurridizos y veloces que son sus receptores. Me preocupan SmithSchuster, Washington y Johnson en rutas cruzadas por el centro. Si agarran el oval en carrera, pueden hacer añicos nuestra defensa zonal. No obstante, alguna bomba (o más de una) se jugará, porque va en su ADN. Aquí el peligro es Claypool, un novato que se disputa con Higgins ser el mejor WR rookie del año, y que se está compenetrando muy bien con Big Ben. Es rápido, pero sobre todo, fuerte, una combinación que nos viene fatal. A Bates se le multiplica el trabajo, esperemos que esté acertado.

Corriendo se están encontrando con más problemas. No sabría identificar si son problemas de línea ofensiva o de esquema, con esas extrañas formaciones con muchos posibles corredores llegando a la vez al mismo punto de encuentro para confundir sobre quién lleva el balón finalmente. Sobre este aspecto, destacar que los receptores McCloud y el propio Claypool están resultando muy peligrosos como corredores. Quizá, en este partido concreto, haya que evaluar si los frontales que prepara Anarumo con 5 bloqueadores en la línea son realmente eficaces.

Volvemos a necesitar un gran partido de Bates patrullando la zona profunda para tener opciones en este partido (foto de Andy Lyons/Getty Images)

 

El rival

De un conjunto que a estas alturas de la competición sigue invicto (8-0), es de esperar que esté en lo más alto de todas las categorías. Y así es. Es el 5º equipo que más puntos anota y el 4º que menos encaja. Su ataque no está siendo muy espectacular (19º de carrera, 22º de pase), su defensa en cambio está a muy alto nivel (9ª contra la carrera, 5ª contra el pase), siendo especialmente peligrosa la estadística de turnovers (3ºs en la liga, con un +7 de diferencial).

Llegan razonablemente bien de lesionados, siendo los posibles contagiados por el covid sus principales preocupaciones (el TE McDonald, el propio Roethlisberger…). Su ofensiva está siendo bastante balanceada, no tan incisiva como antaño, pero le vale con anotar un poco más que lo que su defensa se deja encajar, ya que aquí está su fuerte. La defensa acerera es de las mejores de la competición. No sólo es compacta, presionante y pegajosa, sino que es agresiva, pero no en el concepto de sucia como en épocas pasadas, sino en la anticipación para las intercepciones y búsqueda de los fumbles.

Destacaría por encima de todo dos jugadores. Watt está siendo uno de los mejores edgerushers de la liga, y si no acompañamos con un TE por su lado para proteger a Burrow, nos puede hacer muy larga la noche. El otro es el FS Fitzpatrick, auténtico líder de la secundaria, y una amenaza constante.

5 de sus victorias se han producido por sólo una anotación, y en el resto, salvo contra Browns, han sufrido bastante para sacarlas adelante. Por un lado, esto nos dice que no son quizá tan dominantes como su balance impoluto pudiera indicar; pero por otro, que son un conjunto altamente competitivo, que pelea hasta el final, y que sabe desenvolverse a las mil maravillas en estas situaciones de marcador apretado.

Una imagen típica, da igual el año. Roethlisberger en el suelo. Roethlisberger en la banda. Roehtlisberger cojeando en el siguiente drive. Roethlisberger dudoso toda la semana. Roethlisberger fresco como una lechuga el día del partido (foto: USA Today Sports)

 

La clave

Como en partidos anteriores, sería vital que nos pudiésemos poner por delante para que ellos tengan que arriesgar. Su defensa lleva una racha increíble de partidos consecutivos consiguiendo algún turnover, pero también los genera en ataque. Roethlisberger, consciente de que si la caga luego la defensa puede compensarlo, no se corta en lanzar pases comprometidos, y aquí tenemos nuestra oportunidad.

En cualquier caso, como vengo diciendo, lo importante para nosotros no son las victorias sino el juego. En Baltimore nos dieron un baño, me gustaría que a este otro gallito, el enésimo rival en puestos de playoffs de esta temporada, le pusiésemos las cosas más difíciles. Será un día duro en la academia de la NFL para los jóvenes (Burrow, Adeniji, Wilson, Higgins, …) y deben aprovecharlo para, lo principal, salir vivos del envite, y después, comprobar hasta qué punto estamos tan lejos de ser un equipo plenamente competitivo.

La previsión de lluvia creo que nos favorece. No nos veo anotando esta semana nuevamente más de 30 puntos, así que si conseguimos mantenerles en un marcador corto tendremos más opciones. Todas las rachas tienen que terminar, y por qué no puede ser el domingo el final a la que nos están sometiendo los Steelers. Sería bonito romperles el invicto en su propio estadio… ¡qué demonios! ganar a Steelers siempre es bonito, sea cual sea la circunstancia. Esta vez quiero ser optimista, así que pronostico una victoria 21-20 para los nuestros con, esta vez, sí, un drive final vencedor de Burrow.

Que Burrow salga vivo ya será un éxito. Si además consigue desarrollar su juego, será un gran paso adelante en su carrera (foto de Scott Taetsch/Getty Images)

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