Hoy hablaremos de un jugador que muchos recordaréis por qué es de finales de los 90 y principios del 2000. El que fue OLB de los Bengals Steve Foley. Podéis recuperarlo también en el podcast No pudo ser pero estamos en la élite. Era un 6’4 con 265 libras de peso.

Foley nació hace 47 años en Little Rock, Arkansas. Jugando en el Hall High School en Little Rock fue elegido All-Conference, All-State y All-American en dos posiciones la que conocemos de LB pero también la de TE.

Su paso por el College fue en UL Monroe. Era conocido como la “Bestia del noreste”. Pasó inactivo su primer año pero fue el terror de los QB durante los siguientes 3 años. Tiene el récord de sacks de una temporada con 18’5 y para pérdida de yardas con 26’5 en su último año universitario, 1997. Su partido más recordado es en el triunfo de Monroe ante UCF por 45 a 41 en que le hizo 5’5 sacks a Daunte Culpepper. En 1997 fue elegido All-Louisiana MVP defensivo.

Foley era una bestia en la universidad

Los Bengals lo elegimos en la tercera ronda del draft de 1998 en la época de Bruce Coslet. Coincidió con linebackers como Brian Simmons y Takeo Spikes. Con nosotros su mejor temporada a nivel de sacks fue el año 2000 con 4. Pero en los 4 años con nosotros nunca llegamos ni a ganar 5 partidos. O sea, que imaginaos lo bien que estamos ahora.

También jugó un año en Houston al dejar a los Bengals.

Después jugaría en los San Diego Chargers. Donde jugó su mejor año en la liga. Fue en 2004 y acabó con 10 sacks. En un año en que los Chargers cayeron ante los Jets en el Wild card.

En toda su carrera consiguió un total de 25 sacks.

Pero fue noticia habitual por lo que le sucedía fuera del campo. Jugando con los Bengals en el año 2000 llegó a ser detenido hasta en 4 ocasiones. En febrero fue acusado de violencia doméstica por patear la puerta del apartamento de la madre de su hijo y agarrarla por el cuello. Aunque él lo negó diciendo que iba solo a recoger a su hijo para comer.

En abril del 1999 fue arrestado con una orden judicial que lo acusaba de no comparecer ante el tribunal por un cargo de no manutención. Fue liberado con una fianza de 2.000 dólares, pero fue arrestado al día siguiente y fichado por la Policía Estatal de Louisiana por conducir ebrio. Mala manera de gastar los 2.000 dólares de la fianza.

En otra ocasión la policía recibió quejas de que un hombre caminaba por el estacionamiento y disparaba. Según el informe policial estaba colocado y gritaba a los coches que pasaban que la policía lo estaba registrando ilegalmente. Fue puesto en libertad después de pagar una fianza de 700 dólares por alterar la paz por estar borracho. Pero después según el fiscal de la ciudad de Monroe, Foley fue inicialmente identificado como sospechoso por varios testigos. Aunque estos nunca vieron a Foley con un arma. Lo que sucedió fue que escucharon a un portero gritar el nombre de Foley y asumieron que era él el que tenía el arma, pero el portero le advirtió para que se cubriera.

El 3 de septiembre de 2006 recibió un disparo fuera de su casa por parte del oficial de policía fuera de servicio Aaron Mansker que observó a Foley conduciendo de forma errática entre 30 y 90 millas por hora en una autopista de San Diego. El policía iba vestido de civil y siguió a Foley hasta una calle lateral y se identificó como policía sin mostrarle la placa. Foley salió del coche para confrontarse con Masker pero volvió al vehículo y siguió conduciendo. Cuando Foley llegó a su casa salió del coche y se fue hacía Mansker. La pasajera que iba con el LB, Lisa Gaut, se subió al asiento del piloto y arranco el coche y condujo hacia Mansker, que disparó 2 veces al capó, según él en defensa propia. Foley siguió avanzando y Mansker disparó al suelo como advertencia, aunque luego dijo que lo hizo porque Foley había dicho que el arma no era real. Masker vio que Foley lo agarraba por la cintura y le disparó en la rodilla. Foley siguió avanzando y Mansker disparó 3 veces más. Foley fue llevado al hospital local. Fue puesto en la lista de lesionados no relacionados con el fútbol y no jugó en todo 2006, perdiendo su salario de 775.000 dólares. La semana anterior Foley había sido absuelto de múltiples cargos que incluían resistencia al arresto y agresión a un oficial. Foley estaba bebido tambaleándose al salir de un club nocturno en San Diego. Su tasa de alcohol era 3 veces por encima del límite. Foley había estado ahí con sus compañeros de los Chargers.

Por el incidente en Coronado Foley puso una demanda con la ciudad y el policía por las pérdida de ganancias pasadas y futuras y al final se llegó a un acuerdo por el que Steve cobro 5’5 millones de dólares.

Foley no volvió a jugar un partido tras ese incidente.

Desde 2018 es entrenador de DE de la Universidad Incarnate Word en San Antonio, Texas. En las semifinales de los playoff de hace dos años perdieron por 35 a 32 ante North Dakota State, donde jugaba nuestro LG Cordell Volson.

Antes había trabajado como asistente voluntario en la Universidad donde se formó en Louisiana Monroe. La vida de entrenador es mucho menos polémica que la de jugador afortunadamente.

Foley es actualmente entrenador y parece haber dejado atrás sus problemas extradeportivos