La clave:

Esta “infra-bowl” la ganará quien menos errores cometa. No preveo un partido bonito, así que la clave será evitar turnovers, buscar la máxima efectividad, controlar el oval y que pasen los minutos. Con nuestra habitual torrija después del descanso, más nos vale irnos con ventaja al intermedio.

Tenemos a dos entrenadores seguramente dando sus últimos coletazos en sus respectivas franquicias. A dos equipos con múltiples ausencias donde los menos habituales lucharán por hacerse un sitio en la plantilla del año que viene. No se me ocurre un pronóstico menos incierto.

Aun con todo lo expuesto anteriormente, creo que somos favoritos para ganar el partido, y que debemos hacerlo, aunque sólo sea por nuestra condición de locales. Probablemente, ésta sea la última oportunidad para maquillar el balance de una nefasta temporada.