AnalisisBengals 2017

Bengals 0 (sí, cero) – Ravens 20

Derrota, desastre, decepción, disgusto, desesperación… las 5 “D” de esta mañana de Diada catalana. De Desayuno amargo. De Dormir poco y mal, con angustiosas pesadillas sobre el partido de anoche. De Descubrir, con Dolorosa consternación, que nuestro equipo es tan malo como todos nos Decían y nosotros no queríamos ver. En Definitiva, de Despertar a la realidad.

 

La desilusión es tanto más grande cuanto mayor es la diferencia entre lo esperado y lo real. Tras una desmoralizadora temporada 2016, todos anhelábamos el regreso de la competición para revertir la situación. Por eso, realizar tan grotesco ridículo la jornada inaugural parece que aún nos duela más.

 

Normalmente, la primera semana suele ser un poco como la quinta de pretemporada. Los equipos aún no ruedan todo lo finos que deberían, y son más comunes las equivocaciones que los aciertos. Sólo hay que echar un vistazo al resto de la jornada. Es comprensible que física y técnicamente no se esté al 100% y se produzcan con más frecuencia de la deseable, errores de “ejecución”. Sin embargo, donde no se puede fallar es el aspecto mental. Y el repaso que los Ravens dieron a todos nuestros técnicos, uno por uno, fue de dimensiones bíblicas.

 

Desde que allá por Abril salió el calendario, los técnicos han tenido casi 5 meses para preparar el partido. Además, el azar nos emparejó con un rival divisional al que conocemos de sobra (o deberíamos). Pese a todo, en ningún momento del partido, en ninguna fase del mismo, fuimos capaces de imponernos. Su superioridad fue total y manifiesta, y ampararse en el desacierto de los jugadores para justificarlo son excusas de mal perdedor.

 

Los Ravens tenían muy claro a lo que venían. Presionar a Dalton y esperar a que el partido se les pusiera de cara aprovechando las oportunidades que tuvieran. Su potencial ofensivo es de momento limitado, pero sabían cómo hacernos daño. Primer drive de pasecito corto a Woodhead (hasta que se lesionó). Después, ya con el marcador a favor, carrera machacona para quemar tiempo y proteger a Flacco. Una táctica de manual, perfecta, amparándose en su excelente defensa y aprovechando nuestros regalos en forma de turnovers y penalizaciones.

 

Todos sabíamos que iban a jugar así. Por lo visto, Lewis y su “troupe”, no. Zampese quiere que Dalton juegue a lo que no es. El primer mandamiento de un coordinador ofensivo es conocer a su QB (y Zampese fue su entrenador de posición desde que llegó a la liga, manda huevos). Si Dalton se viene abajo con la presión, redoblemos su protección. Dejar 1 contra 1 a Ogbuehi contra Suggs es un pasaporte al sack, por más que Alexander se empeñe en hacernos creer otra cosa. El ataque fue tan plano, o más, que en 2016. La defensa, aunque no tan mal, también tuvo lo suyo. Si el año pasado teníamos problemas en defender el pase corto al medio y la carrera, este año… volvemos a las andadas. Ninguna solución ante lo evidente, impotentes para pararles aun sabiendo lo que harían. Si resulta que la baja de Burfict es tan fundamental, entonces que quiten a los entrenadores, porque demuestran que están ahí para nada.

 

Sin embargo, siendo justos, también hay que repartir responsabilidades entre los jugadores. El partido de Dalton fue horroroso, con errores imperdonables. La línea, tan mal como suponíamos. Los receptores incapaces de zafarse de su marca. Los linebackers placando a los jugadores 3 y 4 yardas después del contacto (eso cuando contactaban…), situaciones de 3ª y largo donde se dejaban a los RBs campar a sus anchas… hay culpas para todos.

 

La conclusión que nos deja tan triste debut es que la temporada 2018 se nos puede hacer muy larga. Está claro que no todos los equipos van a tener una defensa tan extraordinaria como la de Baltimore, pero les han enseñado el camino a seguir. ¿Lo mejor? Que esto sólo ha hecho empezar y hay tiempo más que de sobra para reaccionar, empezando el próximo jueves, por lo que no tenemos tiempo de lamernos las heridas, sino de preparar bien para el siguiente envite. ¿Lo peor? Que no se atisban soluciones en el horizonte…

A continuación, como siempre, las cosas que me gustaron y las que no.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.